
Nuevo Disnabe y 40 años del Acuerdo de Montevideo: “Hoy en día con la Armada argentina estamos en una muy buena posición”
El también gobernador marítimo de Puerto Williams, capitán de navío César Miranda, destaca las positivas relaciones que mantiene con la institución al otro lado del Beagle, a cuatro décadas de la casi guerra entre ambas naciones. También anticipa las labores de reconstrucción de dos inmuebles de la Armada incendiados el año pasado y su labor en la búsqueda del submarino ARA San Juan.
A tan sólo cuatro días de haber asumido como nuevo comandante del Distrito Naval Beagle (Disnabe) y gobernador marítimo de Puerto Williams, el capitán de navío César Miranda debió recibir a una comitiva liderada por la máxima autoridad del país, el Presidente de la República Sebastián Piñera, dos de sus ministros y los más altos mandos de las Fuerzas Armadas.
“Siempre es relevante que nuestras máximas autoridades lleguen a nuestra jurisdicción. Nos llevó a cabo tener una planificación que salió de acuerdo a lo que teníamos previsto y gracias a Dios todo resultó sin inconvenientes”, dice el oficial de la Armada, sentado en su oficina donde cuelgan cuadros del Primer Mandatario y de Arturo Prat.
Y el hecho era trascendentalmente importante: la conmemoración del 40° aniversario del Acuerdo de Montevideo de no uso de fuerza entre Chile y Argentina, tras una mediación del Papa Juan Pablo II en 1978. Esto confluyó en el Tratado de Paz y Amistad de 1984, el cual daba totalmente por finalizado el conflicto del Beagle que casi llevó a la guerra a ambas naciones, principalmente por la disputa de las islas Picton, Nueva y Lenox.
El 8 de enero pasado, el Presidente Piñera encabezó una ceremonia a bordo del buque Piloto Pardo. En medio del canal Beagle y cercano al islote Snipe, homenajeó a una treintena de veteranos de las Fuerzas Armadas. “Hay que tener presente que las circunstancias al día de hoy difieren de lo que fue hace 40 años atrás, y creo que el mejor y más relevante reconocimiento que se le pueda hacer a aquellos veteranos es precisamente que nuestra máxima autoridad del país estuviese presente en dicho homenaje”, comenta Miranda.
Retorno a Puerto Williams
A lo largo de su carrera en la Armada, Miranda ha estado estrechamente relacionado con la Provincia Antártica Chilena. En 1993 y 1994 fue subteniente de la torpedera Fresia, con la cual estuvo en la zona. Al año siguiente fue comandante del Patrullero Fuentealba, cuyo puerto base estaba en la Isla Dawson, pero gran parte de aquel período apoyó a la comunidad de Puerto Williams. En 2012 fue comandante del patrullero PSG-73 Isaza, cuya base estuvo en la capital provincial, y al año siguiente, durante un año, fue jefe del Estado Mayor del Disnabe.
¿Qué importancia tiene para usted volver a Puerto Williams y ser el comandante de esta zona?
“Es un natural y legítimo orgullo el que siento por estar en esta jurisdicción. Aquí me formé como marino y 30 años después vuelvo con un rol y tareas totalmente diferentes. Por de pronto, mi máximo interés es que la institución esté sumamente bien representada, que nos dé unidades que estén a la altura de la circunstancia de lo que espera la institución y la comunidad, y ser parte de un engranaje de colaboración y ayuda con los distintos organismos públicos que residen en la Isla Navarino, para contribuir al engrandecimiento de nuestra patria y a cada uno en sus respectivas funciones”.
El inicio de sus funciones también estuvo vinculado con nuevas medidas por parte del Gobierno del Presidente Piñera. Esta semana, el Jefe de Estado junto al ministro de Defensa, Alberto Espina, anunció el proyecto de ley que busca modernizar la carrera militar, aumentando el máximo legal de años para oficiales y suboficiales –de 38 a 41 años para los primeros y de 35 a 40 años para los segundos-. Este hecho lo destaca el gobernador de la Provincia Antártica Chilena, Juan José Arcos. “Efectivamente, profesionales que se encuentran en su plenitud de sus condiciones pueden continuar en la institución por un mayor período de años, lo que demuestra el compromiso que tiene el Presidente con sus Fuerzas Armadas”, comenta la máxima autoridad provincial.
Asimismo, Arcos recalca el importante aporte permanente que lleva a cabo la Armada en la Provincia Antártica Chilena. Es así como en diciembre pasado, 37 uniformados de la Armada fueron parte del reconocimiento que la Gobernación les entregó por haber participado en distintas labores de rescate durante 2018. También agradeció el apoyo brindado por una brigada de la Armada que, junto a funcionarios de Conaf, logró extinguir el incendio forestal de la isla Isabel, al suroeste de la isla Navarino, así como también el cuidado del área de pesca correspondiente a Chile y la protección de la zona antártica que realiza mediante patrullajes junto a la Armada argentina.
Incendios de 2018
La Provincia Antártica Chilena sorteó dos lamentables siniestros el 2018. Por un lado, el incendio de julio pasado que consumió por completo la Gobernación Marítima y Capitanía de Puerto de Bahía Fildes en la Antártica, y, por otro, el incendio que afectó al supermercado naval de Puerto Williams en diciembre pasado. Si bien no hubo fallecidos que lamentar, fueron duros golpes que debieron sopesar.
Consultado por los próximos pasos a seguir en cuanto a las reconstrucciones de ambas edificaciones, el comandante aclara que si bien fueron dos hechos lamentables, son proyectos distintos entre sí, pues tienen normativas medioambientales y de construcción distintas. “Hablar de plazos en lo inmediato para ambas situaciones es quizás un poco prematuro”, anticipa.
“En el caso particular de la Antártica, se tiene que dar cumplimiento de acuerdo al Protocolo de Madrid (…) Ya llegaron los módulos a la Antártica para que las actividades vuelvan a retomar su normalidad en el emplazamiento físico cercano donde estaban nuestras antiguas dependencias siniestradas, porque la autoridad marítima, en otras dependencias, y con el apoyo de la Fuerza Aérea y del Inach, siguió cumpliendo sus funciones en el territorio antártico sin perjuicio de los daños que sufrió la infraestructura de Bahía Fildes”, relata. Justamente, cuatro módulos totalmente equipados y amoblados para ser utilizados transitoriamente, llegaron a la isla Rey Jorge, en la Antártica, la semana pasada.
“Con respecto al supermercado de Puerto Williams, todo es bastante más reciente. Se están llevando a cabo las pericias, hay una investigación sumaria en curso. Se está trabajando con las empresas aseguradoras, las pólizas, etc.”, comenta. Sin embargo, destaca la oportuna labor realizada por su antecesor en el cargo, el otrora comandante César Quiroga. “A una semana de ocurrido el siniestro, el supermercado continuó funcionando en otras dependencias de manera normal, lo cual permitió que la familia naval, que es el público objetivo a lo que apunta el Bienestar que otorga este supermercado, no vio afectada sus necesidades básicas de adquisición de frutas, verduras y otro tipo de elementos que una familia común requiere de un supermercado”, destaca.
Búsqueda del submarino ARA San Juan
El comandante Miranda también jugó un papel crucial en la búsqueda del submarino argentino ARA San Juan, el cual desapareció en mar trasandino tras comenzar su viaje desde Ushuaia a finales de 2017. Finalmente, el 17 de noviembre de 2018 se halló la nave, a 600 kilómetros de Comodoro Rivadavia y a 907 metros de profundidad, muy cerca del punto de desaparición.
Cuando ocurrió el lamentable hecho, Miranda era comandante del buque AGS 61 Cabo de Hornos, el cual fue parte de un equipo internacional que trabajó en una zona definida por la Armada argentina para tratar de encontrar cualquier rastro este submarino, cuyo naufragio finalmente cobró la vida de 44 tripulantes. “Estuvimos 23 días en dicha área y los antecedentes que recopilaron nuestros sensores fueron enviados en su oportunidad a la Armada argentina, que los procesó junto a otra información que ellos pudiesen contar”, relata.
“Nosotros éramos colaboradores de una Armada amiga, que tuvo un siniestro muy lamentable, doloroso, y que con toda nuestra capacidad y con todos nuestros medios ayudamos a una Armada amiga en una situación de adversidad”, añade.
Esto es un claro ejemplo de la amistad entre ambas naciones después de 40 años del conflicto del Beagle. Además, un buque argentino le rindió honores al buque chileno en el homenaje presidencial a los veteranos del Beagle.
“En 40 años han pasado muchas cosas, y yo creo que a nivel de instituciones armadas, y particularmente la Marina, hoy en día con la Armada argentina estamos en una muy buena posición. Hay un diálogo franco entre las respectivas Armadas, de mucha colaboración en el Beagle, tanto con la Armada como con la Prefectura Naval. Tenemos reuniones de acercamiento y reuniones de trabajo de manera periódica. Tenemos una patrulla antártica combinada. Tenemos ejercicios combinados y otras iniciativas que nos hacen ir estrechando lazos permanentemente con ellos”.
Para finalizar, ¿me podría hablar de los proyectos o eventos que vaya a hacer la Armada durante este año?
“La institución tiene un plan de actividades y tiene dos directivas grandes, que son las directivas Pacífico y Mar Pacífico, que está orientada al desarrollo y a las actividades que desarrollan las gobernaciones marítimas. Y en base a eso, contribuir y continuar con nuestro grado de entrenamiento y avistamiento. Buscar que la institución, a través de nuestro día a día de ese trabajo silencioso que desarrollamos, sea conocida por nuestra comunidad. Ser un aporte a los otros organismos públicos en las actividades que se nos requieran y trabajar de una manera muy mancomunada con las distintas autoridades, tanto comunales como de la Gobernación, de la mejor manera posible, para superar situaciones que se puedan presentar durante el año. Nuestra presencia es fundamental en esta isla. Así como también la soberanía, y generar los efectos disuasivos que sin duda se requieren con nuestras capacidades”.